El desafío
Esperar en un avión por un problema con el equipo es una cosa. Esperar en una camilla para una operación es muy diferente.
Para evitar retrasos por fallos en sus equipos quirúrgicos, un gran fabricante de EE. UU. envía a personal de ventas muy cualificado periódicamente a los hospitales para que examine los equipos. No solo es un proceso meticuloso, también es muy caro. Al igual que crea costes de oportunidades: toda la actividad de revisión baja las ventas. Además, la naturaleza manual del mantenimiento implica que la empresa responde lentamente ante los fallos.